40 años cumplen ya los asesinatos y la desaparición forzada que enfrentaron nueve miembros de la familia Ramírez en el Volcán de San Salvador, bajo un operativo militar por el Conflicto Armado, uno de los casos por el que organizaciones y familiares piden justicia y reparación.

Este miércoles, Carlota Ramírez y familiares realizaron un acto en conmemoración a las víctimas de la masacre perpetrada entre el 9 y 10 de mayo de 1982, donde se responsabiliza a elementos de la Fuerza Armada.

Por este caso ya fue denunciado el Estado salvadoreño ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

Carlota relató que  su hermano mayor y su hermana menor fueron asesinados por el Escuadrón de la Muerte y el Ejército; también fueron secuestrados su padre y sobrinos de 13 y 14 años; dos meses después, fue capturado otro de sus hermanos y su madre, la única que pudo ser localizada en el cuartel de artillería.

La familia pide medidas de reparación y que se retome el cumplimiento del decreto 204 del registro de víctimas del conflicto armado con el que se les brindaba ayuda económica.

También pidieron participar en el estudio de la Ley de Justicia Transicional y que la Corte Suprema de Justicia agilice los procesos penales.