«El estado actual de la cadena productiva láctea en estos momentos es complicado, tanto ganaderos como procesadores de leche no atraviesan su mejor momento», así lo indicó la directora ejecutiva de la Asociación Salvadoreña de Ganaderos e Industriales de Leche (ASILECHE), Lorena Heredia.

La titular explicó que luego de la pandemia, los precios de los insumos se dispararon, trayendo consecuencias en diversas cadenas productivas, no solo al sector lácteo.

A pesar del panorama, Heredia aseguró que El Salvador mantiene su capacidad productiva, y que ha derivado en una mayor demanda por sobre otros países de la región. “De hecho que Nicaragua y Honduras también son países que nos proveen producto lácteo para poder abastecer la alta demanda”, añadió.

La directora agregó que a pesar de la crisis en el precio de los insumos el acompañamiento que el gobierno, los funcionario y las instituciones que aportan a la cadena láctea ayudan a la sostenibilidad del sector. Sin dejar de lado a los ganaderos, “tenemos una línea de producción básica que todos los días está trabajando”.

Hasta el 2017 la institución contabilizaba alrededor de 66 mil ganaderos a nivel nacional, entre ellos los pequeños productores, con los cuales, de acuerdo con ASILECHE, trabajarán para ayudarles a producir leche de mejor calidad, grado A.

Competencia desleal de productos lácteos

Heredia manifestó que persiste la competencia desleal por parte de los distribuidores, estas prácticas han sido detectadas en la frontera, donde cruza producto en condiciones inadecuadas. «Debemos tener cuidado que venga con todas las condiciones de inocuidad que garantice que el consumo de ese producto no le va a causar daños a la salud».

“Cuando nosotros vemos producto sin las condiciones adecuadas, nos preocupa porque no hay un control en ellos (…) Hemos tratado de hacer un reglamento de términos lecheros, para que el consumidor entienda que es queso y que no es crema», insistió la líder gremial.