“Para los próximos cinco días ya no se observa ningún sistema de formación tanto en el Pacifico como en el Atlántico, lo único que vamos a tener son los remanentes de las tormentas Blas y Celia”, así lo informó el ministro de Medio Ambiente, Fernando López.

El funcionario explicó que este fenómeno meteorológico dejará de influir, pues ya se está alejando del país, y va con rumbo al oeste del territorio. No obstante, los suelos continuarán húmedos por la cantidad de lluvia acumulada.

Zonas de mayor acumulado:

La alerta de la Comisión Nacional de Protección Civil se mantiene de manera estratificada. En zona costera, alerta roja, Naranja para cadena montañosa y volcánica, y amarilla para el resto de municipios del país.

El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) reportó que en el departamento de Ahuachapán se han tenido un registro de 500 milímetros de lluvia, en acumulado de diez días. En la zona de Jiquilisco, 50 mm y en la estación del volcán de San Miguel tienen un registro de 456 mm.

“Las condiciones se van a ir normalizando, va a llover de aquí a noviembre, en el mes de julio se pronostica una canícula, es decir, una leve baja en las lluvias. Pero siempre pueden ocurrir tormentas a lo largo del país”, manifestó López.

El titular señaló que las autoridades ambientales no solo monitorean el fenómeno meteorológico sino también la geología donde se ven incluidos los volcanes o sismos. Sin embargo, el ministro descartó alguna actividad fuera de lo normal en los volcanes del país.

“Monitoreamos los volcanes 24/7, en el área de geología estamos en aviso, pero por la situación de lluvia, nuestros volcanes activos no han presentado actividad anormal”, indicó el especialista.

El funcionario hizo un llamado a la población a mantenerse informada por canales oficiales. “Todas las entidades que formamos parte del Sistema de Protección Civil estamos trabajando para poder mitigar y atender todas las emergencias que se puedan presentar por la lluvia”.