La Justicia chilena acogió una solicitud de extradición de Estados Unidos en contra de un ciudadano chileno acusado de integrar una amplia red de pornografía infantil, de producir este material y de explotar a menores de edad.

La decisión fue tomada por la Corte Suprema de Chile, específicamente por el ministro instructor Ricardo Blanco, quien accedió a que el ciudadano chileno-estadounidense Jean Daniel Bravo Gidi enfrente a la Justicia de EEUU por los delitos que se le imputan.

Según una publicación de Chilevisión Noticias, el acusado participó de una extensa red internacional de pedofilia “que compartía videos e imágenes de niñas adolescentes y de menores de edad al menos desde 2013 a 2018″.

El juez Blanco tomó esta decisión luego que tuviera acceso a un documento enviado por Estados Unidos, específicamente por el Departamento de Justicia, que incluía datos de las pesquisas desarrolladas por el FBI bajo una operación denominada como “pacifer”, o “chupete” en español.

Gidi fue condenado a 300 días de presidio menor en su grado mínimo “ante el 13º Juzgado de Garantía de Santiago, por almacenamiento de material pornográfico, cumpliendo su pena en libertad”. Esto fue considerado por el magistrado pero se “estimó que los ilícitos invocados por el país del norte no habían sido sancionados en Chile”.

La decisión de extradición adoptada por Blanco es una resolución de primera instancia, lo que significa que la defensa de Gidi apeló y será la Segunda Sala de la Corte Suprema la que defina todo de una buena vez. Mientras sucede esto, el acusado se mantiene con medidas cautelares de arraigo nacional y firma semanal en Carabineros.

Seudónimos en Internet

Entre los antecedentes emanados por el FBI se resalta que Gidi se hacía conocer en Internet como “Danny”, “Light” o “Kurohigexyonko”. En la red el acusado lograba que menores de edad “realizaran actos de connotación sexual”, lo que era compartido en Skype por un grupo de hombres.

Esta red de pedofilia en Estados Unidos ya fue desarticulada y sus miembros condenados. Se estima que hubo alrededor de 100 víctimas y también hubo arrestos en Europa que están vinculados con este caso.

Por medio de una delación que hubo al interior de esta red se conocieron datos de Gidi, como, por ejemplo, su cuenta de PayPal y algunos correos personales. Los datos fueron transferidos a la Policía de Investigaciones (PDI) para detener y condenar al imputado. La defensa del pedófilo acusó que los hechos mencionados por el Departamento de Justicia ya fueron considerados por Chile, y que nadie puede ser juzgado dos veces por el mismo delito. Este último argumento fue rechazado por Blanco, a la espera que la Segunda Sala decida el futuro de Gidi.